Esta mañana tenía cita para visitar la cúpula del Reichstag. Tras pasar el control de seguridad y coger el ascensor que sube hasta el tejado, se entra en la impresionante cúpula. El edificio representa perfectamente el espíritu de la ciudad. Un edificio histórico que, tras la caída del muro, fue reconstruido sufriendo en el proceso una profunda modernización. La obra de Sir Norman Foster es para quitarse el sombrero.
Ya tiene que ser uno mal fotógrafo para que las fotos no luzcan.
La nieve ya ha desaparecido en prácticamente toda la ciudad. Hoy ya no quedaba ni rastro de ella en la plaza de la República.
Del Bundestag he ido al Mauerpark. Estos terrenos formaban parte de la tierra de nadie durante la guerra fría. Todos los domingos se monta en el parque un mercado bastante popular.
Hoy era la media maratón de Berlín (y la de Elche). He hecho transbordo en Alexanderplatz, lugar donde comenzaba y terminaba la carrera. Me ha corroído la envidia al ver a un montón de gente subirse al metro con las zapatillas y la medallita colgando del cuello.
No la he corrido porque cuando supe que me venía a Berlín ya no quedaban plazas. Han participado 30.000 personas. Ahí es nada. En fin, menos mal que ya sólo queda menos de un mes para el BIG 25.